Para implementarla, el Gobierno deberá modernizar los sistemas de todos los efectores públicos del país. Críticas por cuestiones de privacidad y seguridad.
El Congreso de la Nación aprobó por unanimidad un proyecto de ley que establece la obligatoriedad de digitalizar todas las historias clínicas de los pacientes en el país. La iniciativa, que había obtenido dictamen favorable en la comisión de Acción Social y Salud Pública en octubre del año pasado, crea el Programa Federal Único de Informatización y Digitalización de Historias Clínicas y busca garantizar que toda la información del paciente quede documentada en un sistema único.
Según la nueva ley, en el Sistema Único de Registro de Historias Clínicas Electrónicas se dejará constancia de toda intervención médico-sanitaria a cargo de profesionales y auxiliares de la salud, ya sea en establecimientos públicos del sistema de salud de jurisdicción nacional, provincial o municipal, y de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, como en establecimientos privados y de la seguridad social.
Además, se estipula que el sistema deberá contener los datos clínicos de la persona o paciente, de forma clara y de fácil entendimiento, desde el nacimiento hasta su fallecimiento.
Uno de los principales beneficios de la digitalización de las historias clínicas es que permitirá a los pacientes y a los profesionales de la salud acceder a una base de datos de información clínica relevante para atención sanitaria de cada paciente desde cualquier lugar del territorio nacional, asegurando a este que la consulta de sus datos quedará restringida a quien esté autorizado.
Otro aspecto importante de la ley es que establece que la información suministrada no puede ser alterada sin que quede registrada la modificación pertinente, aun en el caso de que tuviera por objeto subsanar un error acorde a lo establecido en la ley 25.326 de Protección de Datos Personales y sus modificatorias.
Así, se garantiza la confidencialidad y seguridad de la información médica de cada paciente. El Gobierno nacional tendrá la responsabilidad de poner en funcionamiento este mecanismo y de organizar el programa en conjunto con las provincias y el distrito porteño.
La autoridad de aplicación deberá determinar las características técnicas y operativas de la digitalización de las historias clínicas del sistema de salud, elaborar un protocolo de carga de historias clínicas, así como diseñar e implementar un software de historia clínica coordinando la implementación interjurisdiccional.
En un último paso, el Gobierno deberá instalar el software de forma gratuita en todos los hospitales públicos, nacionales, provinciales y municipales, y proveer la asistencia técnica y financiera a las jurisdicciones provinciales y de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, para cumplir los objetivos de esta ley.
Implementación
El Gobierno nacional, en coordinación con provincias y la Ciudad de Buenos Aires, será responsable de:• Definir las especificaciones técnicas y operativas.
• Elaborar un protocolo de carga de datos.
• Diseñar e implementar el software correspondiente.
• Instalarlo de manera gratuita en todos los hospitales públicos.
• Brindar asistencia técnica y financiera para su implementación.
Polémica y críticas
Si bien la iniciativa promete mejorar la calidad de atención y agilizar la gestión de información, también ha despertado fuertes cuestionamientos. La Ciudad de Buenos Aires, por ejemplo, planea licitar un sistema de historia clínica digital con almacenamiento en la nube, lo que genera temores sobre seguridad y privacidad.Algunos profesionales y pacientes advierten sobre posibles filtraciones y usos indebidos:
• "Todas las historias clínicas van a estar en manos de cualquiera en poco tiempo", dijo Javier, técnico informático, recordando casos recientes de hackeos a bases de datos públicas.
• "Las empresas y aseguradoras van a acceder antes de contratar o vender un plan de salud", alertó Andrés, pediatra.
• Otros, como Julio, dudan de la capacidad técnica del sistema: "No pueden dar un turno online, mirá si van a digitalizar todo".
Seguridad y confidencialidad
La principal preocupación gira en torno a la protección de datos:• "Solo deberían acceder los profesionales del lugar donde me atiendo", opinó Delia, paciente del sistema público.
• Gerardo advirtió que más datos en línea implican mayor exposición a delitos como estafas y extorsiones.
• La médica Morena remarcó que el secreto profesional podría verse comprometido: "Estos datos son mucho más sensibles que una cuenta bancaria".
El uso de la nube como plataforma de almacenamiento concentra buena parte de los cuestionamientos. Para críticos como Fausto, que subraya que muchos servidores están en el extranjero, esto añade vulnerabilidades y riesgos legales.
Fuente: D. Norte