Vuelven a las escuelas del Chaco la primaria de siete años, la secundaria de cinco y la sala de cuatro será obligatoria

Los largos años de estudio y debate del texto de la nueva ley de educación para la provincia no impidieron que pocos minutos antes de la sesión especial se lleven adelante correcciones para compatibilizar algunos artículos en los que había diferencias.

Luego de superada esa instancia se inició el trabajo parlamentario ante la atenta mirada del ministro de Educación, Francisco Romero, los integrantes de su gabinete y dirigentes gremiales, quienes acompañaron todo el proceso para llegar a esta etapa final, y terminado el extenso debate legislativo se sancionó por unanimidad la iniciativa, la cual empezará a regir a partir del año próximo, volviendo al antiguo sistema de escuela primaria y secundaria, pero incorporando entre otras cosas la universalidad de la sala de 4 años.

El debate
Casi con una hora de atraso, los diputados dieron inicio del debate legislativo, apertura del encuentro parlamentario a cargo del presidente del Poder Juan José Bergia quien además de agradecer el trabajo llevado adelante desde la comisión legislativa de Educación y la presencia de funcionarios provinciales, dejó claro que esta década será recordada por ser la del “diálogo y consenso”, y llamó a todos a cuidar esta nueva ley.
Todos coincidieron en calificar a esta sesión como histórica y más allá de expresar sus posiciones políticas y opiniones sobre lo que debe ser el sistema educativo, fue la titular de la comisión de Educación, Elba Altamiranda, quien luego de hacer un análisis de todo el trabajo que se llevó adelante brindó detalles del proyecto, no sin antes asegurar que la comisión sentó las bases de consensos necesarios para la educación de los chaqueños y que para ello se utilizó una metodología participativa que no registra antecedentes.
“Esta ley regula el ejercicio de enseñar y aprender. Realiza una adecuación a la normativa nacional, refleja el contexto y las características propias que la provincia tiene y las demandas educativas que la provincia necesita”, dijo la diputada.
Explicó que se trató de reflejar una política a largo plazo que contenga a todos, que el carácter inclusivo de bien social y público de la educación sea una prioridad para la provincia. Además se plantea la indelegable responsabilidad del Estado para mantener el sistema educativo como prioridad provincial.
“Para reconocer a la educación como un derecho fue necesario incorporar en la norma el proceso de integración escolar, sin olvidar a las personas con discapacidad, como medio estratégico metodológico en todos los niveles, además se habla de la incorporación de enseñanza de lenguas de señas argentinas o la educación intercultural bilingüe que asegura derechos a pueblos indígenas”, indicó Altamiranda.
Hizo mención a que esta normativa también hace referencia a la educación hospitalaria y domiciliaria con lo que se equiparan derechos y brinda posibilidades a educandos que por situaciones de salud no pueden asistir a la escuela formal y se debe garantizar el servicio en hospitales, clínicas o su domicilio. Con el mismo sentido se incorpora educación en contexto de encierro donde se garantiza el derecho educativo a las personas privadas de libertad.

Las posiciones
Además de permitir la participación del ministro Romero, uno a uno los diputados fueron haciendo conocer sus posiciones sobre el proyecto de ley que llegó al recinto con el despacho unánime. La justicialista Wilma Molina manifestó que “si bien es cierto que no se podrá complacer a todos, nadie puede dudar que aquí estan expresados los anhelos que surgieron del consenso logrado de los aportes mayoritarios”. Asimismo resaltó la decisión del gobernador Jorge Capitanich que a pocos días de haber asumido junto a la entonces ministra de Educación Maria Inés Pilatti Vergara (presente en el recinto) tomó la decisión de realizar este proyecto luego de un congreso.
Por su parte el diputado de Proyecto Sur, Carlos Martínez, criticó fuertemente al neoliberalismo que llevó a la educación a sus peores situaciones, pero a la hora de hablar del proyecto hizo mención a las claras definiciones sobre inclusión educativa, pero también “es importante la definición sobre emergencia educativa que fue propuesta de los gremios”.
El diputado del Frente Grande Fabricio Bolatti indicó que “esta ley significa el fin de una triste etapa en la educación provincial que se estructuró con las condiciones de la ley Federal de Educación, la cual entre otras cosas de a poco eliminaba las escuelas técnicas como definición estructural laboral y productiva. Esta nueva ley nos permitirá recuperar la unidad del sistema educativo, donde conviven dos sistemas”. Además reconoció que llegar a esta etapa fue gracias a que en 2006 se derogó la ley federal y se acompañó con la sanción de la ley de financiamiento educativo.
También la vicepresidenta de la comisión de Educación, María Lidia Cáceres, destacó la importancia del texto consensuado porque “permitirá que conozcamos más sobre nuestra esencia de provincia pluricultural y plurilingüe. No se va a priorizar en el estudio lo que pasó con Napoleón sino qué pasó en Napalpí. También es de importancia la obligatoriedad de la educación secundaria y esta es una apuesta histórica”.

Fuente: D. Norte