La suba de precios no da tregua y complica la mesa familiar

Persisten las subas generales en los alimentos y para los chaqueños es cada vez más difícil llenar la heladera. El costo promedio del kilo de carne no baja de los $700.

Mientras que se espera que el Instituto Nacional de Estadísticas y Censo (Indec) de a conocer la actualización mensual del Índice de Precios al Consumidor, los incrementos en el rubro de la alimentación complica cada vez más a las familias chaqueñas que intentan llenar la heladera o simplemente llevar la comida a la mesa. De acuerdo con el relevamiento realizado por NORTE, se pudo constatar fuertes subas en verduras, mientras que la carne tuvo alzas moderadas.

El Indec difundirá el Índice de Precios al Consumidor (IPC) el próximo jueves, que ya alcanzó 32,3% en los primeros ocho meses del año y 51,4% interanual.

Entre los alimentos relevados en las verdulerías y carnicerías locales, su pudo comprobar que las frutas y verduras se vieron fuertes aumentos en varios de estos productos. El más marcado es el precio de los tomates, ya que tanto los redondos como los peritas, hoy, no bajan de $260 el kilo, aunque hay lugares en los que es aún más caro. Otro producto que dio un salto muy grande fue el zapallo, que en cinco meses pasó de entre $39 y $49, a $100.

También hubo subas en el choclo, la lechuga, la chaucha y la zanahoria. Las frutas, en cambio, tuvieron un comportamiento más moderado, debido a una fuerte influencia estacional, aunque se viene mostrando una gran dispersión de precios.

En las verdulerías capitalinas, se venden naranjas por $90 y por $150, las manzanas por $125 y por $200, papas por $70 y por $100, limones por $80 y por $120, y las mandarinas se pueden encontrar por $90 y por $120 la docena, dependiendo la ubicación del local.

También, NORTE comparó los precios de diferentes cortes de carne en distintos puntos de venta de la capital. Aquí se ve que hubo alzas bastante moderadas en los cortes de vaca, pero sí se dieron saltos considerables en el pollo y el cerdo Por el lado del pollo, el kilo del animal entero está entre $170 y $200. En cuanto al cerdo, hay cortes que subieron más, como el matambre o el carré, y otros que tuvieron una variación menor, como la bondiola o el solomillo.

Los precios volvieron a acelerarse y se vuelve más difícil alcanzar los estándares del costo de vida.

En cuanto a la carne vacuna, la situación fue distinta. Hubo incrementos en cortes como paleta, cuadril, nalga o picada común. En las góndolas locales, en tanto, hubo subas pero menores, casi sin variaciones para el cuadril y el asado. Sí hubo aumentos más fuertes en otros cortes, como roast beef y falda.

Al igual que sucede con las frutas y las verduras, la dispersión de precios es bien marcada en la carne, aunque en general responde a la calidad de los productos. No obstante, hay tapa de asado a $430 y a $785 (83% de diferencia), hay falda a $230 y a $415 (81%), hay vacío a $500 y a $835 (67%), hay tapa de nalga a $550 y a $780 (42%), y hay asado a $360 y a $460 (28%).

Tras mostrar una desaceleración en agosto, los precios volvieron a acelerarse en septiembre, y el costo de vida se vuelve más difícil de alcanzar mes a mes. Las subas en alimentos parece ser un tema que el Gobierno no puede controlar, y sus efectos se vinculan, en parte, con las desesperantes cifras que tiene el Chaco en materia de pobreza y malnutrición infantil, entre las más alta del país


Fuente: D. Norte