Un informe del New York Times reveló que un grupo de educadores de EEUU apuesta por las nuevas tecnologías en el aula como herramientas para estimular el debate. Afirman que esto "atrae a los estudiantes" y los anima a opinar cuando en la clase tradicional "rara vez levantan la mano"
Crédito foto: MashableMargaret Rubega, una profesora de ecología y biología de la Universidad de Connecticut, EEUU, puso en práctica un experimento cuyo eje es la red social de microblogging por excelencia: se trata del estudio del comportamiento y el lenguaje de los pájaros a través de Twitter.
Cada semestre, la docente propone a sus alumnos inaugurar una cuenta –si es que no la tienen– en la red y postear cada vez que observan un rasgo interesante de comportamiento ornitológico bajo el hashtag #birdclass.
Lo mismo ocurre en el caso de Erin Olson, una profesora de inglés de Iowa que, tras la lectura en clase de un texto observó que los alumnos enriquecían el debate oral a través de sus laptops.
Obviamente, el hecho genera opiniones encontradas: ¿se pierde la capacidad de mantener un debate cara a cara, y la riqueza del mismo con las nuevas tecnologías en el aula?
"Las redes sociales no vienen a sustituír la conversación tradicional en el aula –afirma Nicolás Provenzano, profesor de Inglés en una escuela de Michigan–. Es sólo una manera de facilitar y aportar a la misma. Además, permite que la conversación se extienda fuera del horario de clase y brinda las ideas que se discutirán al día siguiente".
Por supuesto hay quienes se oponen a esta modalidad argumentando que los "canales laterales" de comunicación en el aula sirven para distraer a los alumnos y estimular las bromas y agresiones sobre el tema.
Los detractores también afirman que el uso de las laptops en clase hace que los estudiantes no presten atención, chequeen mails o se dediquen al shopping online.
No obstante, los profesores twitteros replican que "por eso se puede reducir este tipo de actividades dándoles otras relacionadas con la clase que también se resuelvan a través de la computadora".
Otras variantes de herramientas tecnológicas incorporadas al aula son, por ejemplo Google Moderator o Today's Meet, que ofrece una sala virtual para el debate.
Pero también hay quienes optan por aplicar la "Filosofía Twitter" al mundo real. Es el caso de un educador de Carolina del Norte quien, en vez de incorporar Twitter a la clase les propone a sus alumnos “un ejercicio diario de escritura en no más de 140 caracteres acerca de alguna observación sobre el mundo natural".
"Es una especie de Haiku del Siglo XXI" asegura. "Los estudiantes abrazan la iniciativa. Y varios de ellos manifestaron el interés de continuar el debate, una vez que llegan a su casa, y ahí sí lo hacen a través del Twitter real".
Crédito foto: MashableMargaret Rubega, una profesora de ecología y biología de la Universidad de Connecticut, EEUU, puso en práctica un experimento cuyo eje es la red social de microblogging por excelencia: se trata del estudio del comportamiento y el lenguaje de los pájaros a través de Twitter.
Cada semestre, la docente propone a sus alumnos inaugurar una cuenta –si es que no la tienen– en la red y postear cada vez que observan un rasgo interesante de comportamiento ornitológico bajo el hashtag #birdclass.
Lo mismo ocurre en el caso de Erin Olson, una profesora de inglés de Iowa que, tras la lectura en clase de un texto observó que los alumnos enriquecían el debate oral a través de sus laptops.
Obviamente, el hecho genera opiniones encontradas: ¿se pierde la capacidad de mantener un debate cara a cara, y la riqueza del mismo con las nuevas tecnologías en el aula?
"Las redes sociales no vienen a sustituír la conversación tradicional en el aula –afirma Nicolás Provenzano, profesor de Inglés en una escuela de Michigan–. Es sólo una manera de facilitar y aportar a la misma. Además, permite que la conversación se extienda fuera del horario de clase y brinda las ideas que se discutirán al día siguiente".
Por supuesto hay quienes se oponen a esta modalidad argumentando que los "canales laterales" de comunicación en el aula sirven para distraer a los alumnos y estimular las bromas y agresiones sobre el tema.
Los detractores también afirman que el uso de las laptops en clase hace que los estudiantes no presten atención, chequeen mails o se dediquen al shopping online.
No obstante, los profesores twitteros replican que "por eso se puede reducir este tipo de actividades dándoles otras relacionadas con la clase que también se resuelvan a través de la computadora".
Otras variantes de herramientas tecnológicas incorporadas al aula son, por ejemplo Google Moderator o Today's Meet, que ofrece una sala virtual para el debate.
Pero también hay quienes optan por aplicar la "Filosofía Twitter" al mundo real. Es el caso de un educador de Carolina del Norte quien, en vez de incorporar Twitter a la clase les propone a sus alumnos “un ejercicio diario de escritura en no más de 140 caracteres acerca de alguna observación sobre el mundo natural".
"Es una especie de Haiku del Siglo XXI" asegura. "Los estudiantes abrazan la iniciativa. Y varios de ellos manifestaron el interés de continuar el debate, una vez que llegan a su casa, y ahí sí lo hacen a través del Twitter real".
Fuente: Infobae
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